¿Quién no se ha lamentado y hasta ha maldecido el mal servicio que recibe de su empresa operadora de telefonía móvil? Movistar, Claro o Nextel, ninguna se salva. Promociones confusas, ofrecimientos comerciales insistentes y saldos vencidos misteriosamente, larga es la lista de motivos que en algún momento nos han llevado a desear cambiar a nuestro proveedor de servicio telefónico aún sabiendo que la similitud entre la oferta comunicacional de las mencionadas empresas nos pone en un verdadero estado de monopolio. ¿Para qué cambiarme si ofrecen, cobran y abusan de lo mismo?
Telefónica encabeza la lista de empresas con más quejas por parte de los usuarios en nuestro país. Organismos como la Defensoría del Pueblo y la Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios (Aspec) ven su labor limitada sólo al hecho de informar sobre los reclamos que ésta genera en los consumidores, ninguna de estas podría hacer que Telefónica del Perú deje de producir el 8% de las ganancias totales que su matriz española recauda a nivel mundial. La contundencia de esta ganancia, así como los 6,000 millones de dólares que Telefónica asegura haber invertido en el Perú durante sus 17 años de permanencia aquí, hacen muy difícil la posibilidad de que el gobierno le niegue definitivamente la renovación de licencia que requiere para seguir ofreciendo sus servicios en nuestro país. Sin embargo, es una buena señal del gobierno la de sentar posición sobre el tema incluso frente al ámbito internacional.
Telefónica se niega a pagar una deuda tributaria ascendente a más de S/. 2,500 millones aduciendo la invalidez de este cobro por tarde de la Sunat y el tema ya se estaría tratando en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI). Este atisbo de bronca tributaria fue tema de conversación entre el presidente Ollanta Humala y el rey de España, Juan Carlos I. “Para nosotros es una preocupación que grandes empresas que tienen muchos años en el Perú estén judicializando o teniendo un proceso contencioso con el Estado por el pago de tributos”, afirmó el mandatario luego de participar en XXI Cumbre Iberoamericana realizada en Paraguay. La cuestión planteada por el Ministerio de Economía y Finanzas es simple: No hay renovación de licencia mientras no se resuelva el pago de la deuda.
Cabe aclarar que la empresa deudora es Telefónica del Perú, mientras que Telefónica Móviles es la que requiere de la pronta renovación de licencia. ¿Mismas empresas? Aunque sean del mismo dueño, estas son personas jurídicas distintas y ciertamente la ley no pide que una esté libre de deudas para autorizar el funcionamiento de la otra. Aun así, por fin esta vez empieza a notarse que la gran empresa también debe regirse y pagar según lo manda la ley a la que se adscribe para funcionar, la ley peruana.
0 comentarios:
Publicar un comentario