18 de octubre de 2011

No es un ataque mediático. ES UNA DENUNCIA

La denuncia realizada en contra del segundo vicepresidente, Omar Chehade, por tráfico de influencias es muy preocupante y vergonzosa para el gobierno de Ollanta Humala y debe ser esclarecida cuanto antes. Sin embargo, a través de los comentarios que se escriben en diferentes portales de internet se puede constatar que muchos ciudadanos buscan desmerecerla y consideran que ésta es parte de una táctica oscura o maquiavélica del periodismo en alianza con la derecha peruana para desacreditar a la izquierda que representa el actual Presidente. Gran error que me recuerda la siguiente frase: “no hay peor ciego que el que no quiere ver”.

En primer lugar, esta denuncia ha sido difundida por IDL – Reporteros, un medio cuyo estilo de hacer periodismo dista mucho de las formas derechistas que podemos ver en diarios como Correo o Perú 21.

En segundo lugar, el director de IDL – Reporteros es Gustavo Gorriti, un periodista a quien muchos identificarán de izquierda.

Y, finalmente, hay que observar que el medio que mayor “rebote” le ha dado al tema es La República, que durante la campaña presidencial manifestó abiertamente su respaldo a Ollanta Humala.

Por lo tanto, decir que esta denuncia es una campaña sucia de la prensa es una exageración que simplemente no tiene validez alguna. Chehade ha sido denunciado y, como ciudadanos, debemos exigir transparencia en cada una de las actividades de nuestras autoridades, pues debemos y merecemos conocer siempre la verdad, duela a quien le duela.

Así mismo, cabe destacar que el propio presidente del Perú, Ollanta Humala, se presentó ante la Sociedad Interamericana de Prensa para manifestar su respeto a la libertad de expresión y respaldar el ejercicio del periodismo en nuestro país, una actitud positiva que debe ir acompañada del ejercicio responsable de los medios de comunicación y del interés de los ciudadanos por estar siempre informados.

Es necesario que los medios de comunicación que reflejaron su simpatía hacia un Humala candidato durante la campaña cumplan la promesa de supervisar y fiscalizar la labor de un Humala presidente. Y bien por aquellos que ya lo están haciendo. Por su parte, la ciudadanía, por más simpatizante que sea del gobierno de turno, debe dejarse llevar por la razón y no tratar de defender lo indefendible por puro apasionamiento. Sólo así contribuiremos a que la prensa en el Perú sea cada vez mejor.

1 comentarios:

el procurador se me cayó. una vaina ya no confiar en nadie

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